(Publicado en La Discusión)
Los alcaldes de la comuna de Tomé, Penco, Talcahuano, Bulnes, en conjunto con representantes de la Asociación Laja-Diguillín, asistieron a una reunión, en la comuna de Bulnes, que buscó seguir avanzando en las conversaciones de unión entre los territorios, en su oposición contra la instalación del proyecto de terminal marítimo y gasoducto en Lirquén, y la termoeléctrica en Bulnes.
El proyecto de la empresa Australis Power, conocido como Octopus, convocó a las máximas autoridades comunales, para fijar cuáles serán los próximos pasos a seguir. Ernesto Sánchez, alcalde de Bulnes, fue el anfitrión, y explicó que el desconocimiento del proyecto ha generado bastantes dudas e incertidumbre.
“No somos la pieza de ajedrez de nadie, no pueden movernos como quieran, por eso es importante que unamos fuerzas y fijemos un plan de acción para luchar contra quienes tratan de atentar con la agricultura de nuestra zona. Si bien somos una comuna pequeña, no nos quedaremos callados, de brazos cruzados, viendo como contaminan nuestra tierra”, explicó Sánchez.
Por su parte el gerente de la Asociación Laja-Diguillín, Sebastián Godoy, explicó que su participación se debe gracias a la invitación del alcalde de Bulnes, que forma parte al igual que otras seis comunas de Ñuble de la asociación, para tomar conocimiento del proyecto.
“No se cuenta con información, por lo cual nos adherimos a la preocupación de Bulnes, ya que no hay claridad de lo que se pretende o se quiere hacer entre Bulnes y San Ignacio. Por eso estaremos pendientes con nuestro socio, para pedir un informe que nos ayude a tomar acciones más claras en el tiempo”, indicó Godoy.
Un solo proyecto
Por su parte el alcalde de Penco, Víctor Figueroa, señaló que la instalación del proyecto eléctrico, que busca generar 1.140 MW e ingresar gas natural licuado a la región, hay que tratarlo en su conjunto entre la termoeléctrica y el gasoducto. Ello luego que la empresa ingresara por separado el estudio de impacto ambiental del terminal marítimo, y no en conjunto con la termoeléctrica, estudio que aún no se presenta.
“La idea es poder contar con recursos disponibles para contratar un abogado, realizar un recurso de protección y ocupar todas las instancias legales necesarias para hacer frente a las complicaciones que nos generará este proyecto”, lanzó.
Luego de la reunión, las autoridades llegaron hasta el camino a Los Tilos, lugar donde se instalará la planta, predio que por lo demás ya se encuentra comprado por Octopus, y que según la alcaldesa de Tomé, Ivonne Rivas, atenta contra todo lo que desean para sus comunas.
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